viernes, 1 de febrero de 2008

Barroco español


BARROCO

Contexto Histórico del Barroco

El siglo XVII fue un período de grave crisis política, militar, económica y social en toda España. Ésta se convirtió en un Imperio de segunda categoría en Europa. Se involucró en la guerra de los Treinta Años. España sufrió grandes derrotas militares y económicas. Francia aprovechó esto y presionó sobre los territorios europeos regidos por Carlos II. Como consecuencia de esta presión, la Corona española perdió buena parte de sus posesiones en Europa, de modo que a principios del siglo XVIII el Imperio español en Europa estaba totalmente liquidado.
La crisis interna no fue menos importante. Se expulsaron a los moriscos (1609), con lo que se arruinaron las tierras de regadío del litoral del Levante, y permitió la corrupción administrativa. Posteriormente, hubo sublevaciones en Cataluña, Portugal, Andaluncia, Nápoles y Sicilia. La rebelión catalana fue sofocada el año 1652, mientras que la sublevación portuguesa desembocó en la independencia de ese país (1668).
España sufrió una grave crisis demográfica (poblacional), debido a la expulsión de los moriscos y de la mortalidad provocada producidas por las continuas guerras, el hambre y la peste. La imagen siguiente da cuenta de esta crisis:

La sociedad española del siglo XVII era una sociedad escindida, divida, fragmentada. La nobleza y el clero conservaron tierras y privilegios. Los campesinos sufrieron toda la crisis económica. La miseria en el campo arrastró a muchos campesinos hacia las ciudades, donde esperaban mejorar su calidad de vida; pero en las ciudades se vieron abarcados al ejercicio de la mendicidad cuando no directamente a la delincuencia. Un ejemplo de esta pobreza social, económica, política puede leerse en la novela picaresca que arranca con el Lazarillo de Tormes. Este texto sirvió para denunciar la pobreza y la injusticia social del gran imperio español.
La imagen que sigue nos propone una escena en la que el Lazarillo se venga del ciego, el primer amo que le hizo la vida muy difícil.




El racionalismo.
El pensamiento racionalista tuvo en el siglo XVII algunas de sus figuras más destacadas: Descartes, Leibniz, Spinoza... Todos ellos relegaron la posibilidad de un saber revelado y defendieron que la razón es la principal fuente de conocimiento humano. De este modo sentaron las bases del racionalismo. En España, la influencia del racionalismo apenas se dejó sentir. En su lugar, se registra una actitud de escepticismo hacia la naturaleza humana, escepticismo que conduce a una visión pesimista del mundo radicalmente opuesta al optimismo renacentista. Un buen ejemplo de esta actitud lo encontramos en Baltasar Gracián, para quien las únicas armas de que se dispone para combatir el estado de crisis y ruina de la sociedad son el individualismo y la desconfianza hacia los demás.

Literatura Barroca
El Barroco valoró la libertad absoluta para crear y distorsionar las formas, la condensación conceptual y la complejidad en la expresión. Todo ello tenía como finalidad asombrar o maravillar al lector.


El conceptismo
Corriente literaria que profundiza en el sentido o concepto de las palabras; se puede definir como una agudeza mental que da preferencia a las ideas con el fin de impresionar la inteligencia o el deseo de decir mucho con pocas palabras.


Recursos
- Frecuentes metáforas, no con el fin de embellecer, como el culteranismo, sino para impresionar la inteligencia: Lumbre por pecado.
- Juegos de palabras: utilización de una misma palabra con significados diferentes: "Salió de la cárcel con tanta honra, que le acompañaron doscientos cardenales, sino que a ninguno llamaban eminencia". (Quevedo.)
- Estilo breve y conciso, que se logra mediante la elipsis o eliminación de palabras. Aplican el refrán: "Lo bueno, si breve, dos veces bueno".
- Antítesis de palabras, frases o ideas, con el fin de impresionar y agudizar la mente: "Mi negra capa, ya blanca por los pecados".
El representante más destacado es Francisco de Quevedo y Villegas.

El culteranismo
Corriente literaria que cultiva la forma de las palabras dejando en un segundo plano su contenido y pretende crear un mundo de belleza, impresionando para ello los sentidos con los más variados estímulos de luz, color, sonido y con un lenguaje ampuloso y culto.


Recursos
- Abuso de la metáfora con el fin de crear un mundo de belleza absoluta: Puertas de rubíes en lugar de labios.
- Uso frecuente de cultismos: palabras tomadas del latín o del griego: Argentar en lugar de platear; tórrido, umbroso, áureo...
- Abuso del hipérbaton. Consiste en alterar el orden de una oración, con lo que se llega a hacer difícil su comprensión: Un torrente es su barba impetuoso, en lugar de: su barba es un torrente impetuoso.
- Uso de palabras parónimas. Es decir, palabras de un sonido parecido y diferente significado; con lo que logran impresionar y llamar la atención sobre nuestros sentidos: Nubes-naves.
Luis de Góngora y Argote fue el representante más importante.

Estas dos posturas logran su máximo esplendor y representante en Miguel de Cervantes, autor de una de las obras más importantes de la literatura universal: "El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha".
Esta obra tiene dos partes: la primera fue escrita hacia 1605 y la segunda, en 1615.

Un arte teatral
El barroco artístico contrasta abiertamente con el ideal de armonía, proporción y medida que propugnó el Renacimiento. Las principales características del arte barroco son:
* Dinamismo. El artista barroco desea crear sensación constante de movimiento. Frente al predominio de las líneas rectas en el arte renacentista, el Barroco se vale, sobre todo, de la línea curva.
* Teatralidad. El artista intenta conmocionar emotivamente al espectador y para ello recurre a procedimientos hiperrealistas.
Esta intencionalidad se aprecia, por ejemplo, en la representación de Cristos yacentes y en toda la imaginería sacra.
* Decorativismo y suntuosidad. El artista del Barroco atiende por igual a lo esencial y a lo accidental. De ahí su minuciosidad en la composición de pequeños detalles y su gusto por la ornamentación.
* Contraste. El artista barroco se manifiesta contrario al equilibrio y a la uniformidad renacentistas. Su ideal es acoger en una misma composición visiones distintas, y hasta antagónicas, de un mismo tema. En los cuadros de asunto mitológico, por ejemplo, los dioses aparecen mezclados con personajes del pueblo.
La otra gran figura del drama del Siglo de Oro fue Pedro Calderón de la Barca, quien comenzó siguiendo de cerca el modelo de la comedia de Lope, pero en su madurez, aunque sin modificarlo sustancialmente, aportó ciertos rasgos personales. Su obra se caracterizó por el enfoque más meditado de los asuntos, la preferencia por lo ideológico o simbólico y la construcción más rígida de las piezas teatrales. En la técnica escénica alcanzó un virtuosismo notable. Los dos grupos más importantes de la producción calderoniana son las comedias de enredo y los dramas, históricos, filosóficos y religiosos, entre los que destacaron La vida es sueño, El alcalde de Zalamea y El mágico prodigioso.

No hay comentarios: